En un artículo recientemente publicado, el Dr. José Edgar Correa Terán, profesor e investigador de tiempo completo de la Universidad Pedagógica Nacional Unidad, analizó las fortalezas y debilidades del programa Aprende en Casa II e hizo notar que, a pesar de que existen plataformas con herramientas para actividades on line de apoyo a la educación a distancia, los profesores se han decantado por las actividades off line, es decir, prefieren seguir un programa que envían a sus alumnos para que entreguen ciertos productos, en su mayoría escritos, en forma diaria o semanal.
En cuanto a los programas de televisión, el Dr. Correa Terán destacó que, a través de ellos, se intenta la interacción con los alumnos. Se les pide que realicen actividades relacionadas con los aprendizajes y que mantengan la activación física.
Sin embargo, en las plataformas online, diseñadas para una interactividad más predominante, las actividades se han vuelto monótonas pues, en general, consisten en el envío de videos para ser revisados por los alumnos para que, después, hagan algún tipo de reporte. Según la observación del autor, los chicos se muestran aburridos cuando tienen que revisar videos continuamente.
Como docentes, podemos romper esta espiral descendente del interés de los alumnos por nuestras actividades, proponiendo una nueva clase de interacción con ellos y entre ellos. Esta propuesta procura animarlos a participar a través del juego.
En el blog Entre docentes, del Gobierno de México, se han publicado estrategias y técnicas para promover la participación de los alumnos. En su artículo titulado Juguemos con sana distancia, encontramos numerosas actividades que están destinadas a que los alumnos jueguen entre ellos en animadas videoconferencias, en vez de pedirles sólo actividades en las que tienen que escribir y reportar.
Esto tiene mucha relevancia en los momentos de crisis que estamos viviendo, porque anima a los niños a divertirse, jugar y reír para ayudarles a aprender al tiempo a fortalecer su salud emocional, haciéndolos sentirse acompañados y parte de un colectivo formado por sus maestros y los demás alumnos del grupo.
Veamos algunos ejemplos de estas estrategias. Para el segundo y tercer ciclos de educación, es decir, de 1° a 6° de primaria. El artículo propone una actividad que consiste en construir cuentos colaborativos. El objetivo de esta actividad es crear una historia de manera colectiva.
El artículo sugiere que se formen grupos de videoconferencia en los que participen tres alumnos o más. ¿Cómo se lleva a cabo?
Un jugador inventa el inicio de una historia con personajes y escenarios, y elige a otro para continuarla.
El próximo sigue la secuencia partiendo de los personajes y escenarios que creó el anterior. Puede introducir nuevos personajes y escenarios.
Se continúa de esta manera hasta terminar con todos los participantes. Al final, se lee todo el cuento.
Ahora revisaremos una propuesta para Secundaria llamada Colección de nombres, en la cual cada alumno seleccionará a un personaje conocido mientras los demás jugarán para descubrir el personaje que cada jugador seleccionó.
¿Cómo se juega?
En hojas de papel los jugadores escriben el nombre de un personaje conocido; por ejemplo, personajes históricos mexicanos, seres mitológicos, etcétera.
Los jugadores se pegan en la espalda el papel con el nombre del personaje elegido.
Cada jugador hace preguntas para descubrir el mayor número posible de nombres y los escribe en una hoja. Se da un tiempo límite por participante.
Al final, gana el jugador que descubrió más nombres.
Interesante, ¿verdad? Invita a tus alumnos a trabajar en equipos con estrategias como estas. Probablemente estás preguntándote: ¿cómo pueden mis alumnos trabajar en equipos a distancia? Si quieres descubrirlo, participa en el webinar que Red Magisterial Meritum presentará el próximo jueves 1 de septiembre donde se darán a conocer herramientas de la GSuite para que los alumnos puedan trabajar en equipos.
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Síguenos, estaremos dando a conocer nuevas estrategias para que tus alumnos participen y se promueva un ambiente agradable, de alegría y acompañamiento, que tanto necesitan durante la crisis social y emocional que representa la pandemia de COVID-19.
Fuente original: redmagisterial.com