Hay una cantidad limitada de horas al año que se pueden dedicar al desarrollo profesional, y lamentablemente, muchos docentes han tenido la experiencia de asistir a cursos que resultan ser totalmente obsoletos.
Abrumados por la capacitación profesional
A menudo, el desarrollo profesional se pasa por alto hasta que llega el momento de implementar un nuevo enfoque educativo, como es el caso de La Nueva Escuela Mexicana. Sin embargo, cuando finalmente se tiene la suerte de participar en un desarrollo profesional de alta calidad, es un momento que realmente vale la pena. ¿Por qué? Porque un buen programa inspira a los docentes, los empodera y les brinda la confianza necesaria para ser educadores efectivos en diversas áreas.
Entonces, ¿cuáles son los cinco componentes clave que se deben buscar al planificar un desarrollo profesional de alta calidad?
1. Aprendizajes relevantes y herramientas inmediatas
¿Cómo impactará este desarrollo profesional en la práctica diaria?
Un programa efectivo debe fortalecer la comprensión del educador, ayudar a identificar claramente las dificultades y éxitos de los estudiantes, y proporcionar herramientas de enseñanza prácticas. Asegúrate de que el desarrollo profesional ofrezca estrategias que puedas implementar de inmediato para ver un impacto positivo en tu aula. Por ejemplo el curso Fomentando la participación en clase, mejoras en mis habilidades docentes
2. Respaldo de una institución acreditada
¿Qué respaldo institucional tiene este desarrollo profesional?
Verifica que el programa esté avalado por una institución de educación superior con reconocimiento oficial de la SEP. Un desarrollo profesional de calidad debe contar con la garantía de una institución acreditada que respalde la formación recibida y asegure su validez en el ámbito educativo. Esto no solo justifica la inversión, sino que también garantiza que recibes información válida y aplicable a tu práctica docente.
3. Prácticas de reflexión continua
¿Qué mecanismos promueve el programa para fomentar la reflexión y la mejora continua?
El desarrollo profesional no debería terminar en una sesión aislada. Busca programas que ofrezcan oportunidades para reflexionar sobre tu práctica, como observar a colegas, compartir experiencias y analizar grabaciones de lecciones.
“No aprendemos de la experiencia… aprendemos reflexionando sobre la experiencia”. - John Dewey.
4. Oportunidades de aprendizaje continuo
¿Qué apoyo adicional hay después de la capacitación inicial?
La mejor forma de consolidar lo aprendido es continuar practicando y perfeccionando esas habilidades. Pregunta por cursos adicionales, recursos en línea, maestrías o doctorados que estén disponibles para ti después de la capacitación inicial.
5. Acceso equitativo para todos
¿Cómo se asegura el acceso equitativo para todos los educadores y estudiantes?
Un buen programa de desarrollo profesional debe ser inclusivo y adaptable. Pregunta cómo se abordarán las necesidades de diferentes grupos, tanto de educadores como de estudiantes. Algunos cursos como El camino de las letras: conociendo las habilidades de lectura y escritura de mis alumnos te ayudarán a identificar las habilidades de tus estudiantes considerando su diversidad.
¡No te conformes! Los programas de IESPE integran estos cinco componentes, al elegirlos, estarás invirtiendo en tu crecimiento y, por ende, en el futuro de tus estudiantes.
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